El té marida muy bien con pastelería dulce como salada, pero cuando organizamos una reunión o tarde de té hay bocados que no pueden faltar.
Los sandwiches son tradicionales a la hora del té. Se pueden preparar con pan blanco, pan integral o pan con variedad de semillas. Siempre ofrece dos o más variedades de sandwiches, por ejemplo, de jamón, de huevo, de salmón, de pepino, etc. Los puedes cortar en pequeños rectángulos, triangulitos o darles formas divertidas como por ejemplo, corazones.
Otros clásicos de la tarde son los famosos scons que pueden ser dulces y salados también para que cada cual elija el que más le plazca.
Los scons dulces se pueden servir solos o acompañados de queso crema o crema batida y alguna mermelada. Los salados también pueden servirse solos o acompañados de jamón cocido, jamón crudo o simplemente queso.
Para estas ocasiones es conveniente preparar porciones pequeñas para poder probar de todo.
Si el bocado es enorme, es imposible hacerlo. Por eso, si incluimos tortas, lo ideal es presentarlas en versión miniatura: mini cheesecakes, mini lemon pies, mini rogels o tarteletas de diferentes frutas: de frutillas, de arándanos, kiwis, peras, etc.
Nunca puede faltar algo de chocolate. Un clásico que todos esperan encontrar son los brownies.
Los alfajorcitos de maicena también son una excelente opción porque se deshacen en la boca debido a su gran esponjosidad y tienen dulce de leche que es un ganador en nuestro país.
Para sorprender, se pueden servir bocaditos agridulces. Es una idea original y deliciosa a la vez. Una rica opción es servir bocaditos de jamón crudo con dulce de membrillo o algún pionono con jamón y ananá o queso azul y ciruelas. La variedad depende de tu creatividad e imaginación.
Para cerrar la tarde, una excelente opción es hacerlo con trufas de chocolate o bombones de chocolate. Las trufas tienen mucho sabor y una textura suave y delicada para el paladar. Son una verdadera tentación. También se pueden entregar como souvenirs para que los invitados se los lleven como recuerdo de la reunión.
Si organizas una fiesta grande, lo mejor es que acomodes la comida al estilo buffet. Si tienes espacio para que los invitados se sienten a la mesa, coloca la comida en el centro de la mesa o divide cada plato entre varias fuentes para que las personas puedan tomarlas sin dificultad.
Si vas a utilizar una bandeja o soporte de pie de tres niveles, lo correcto es colocar los bizcochitos en la parte superior, los sandwiches en el medio y los pequeños pasteles en la parte inferior.
Ahora solo queda que pongas manos a la obra y ¡listo!
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Nota escrita por
Cristina Brevi
Sommelier de té, Tea Blender y Pastelera
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